lunes, 25 de mayo de 2009

Ayer te vi...



Ayer te vi... Unos minutos antes de entrar a tu morada, sentí como las lágrimas rodaban por mis mejillas.

"Te recuerdas dónde es?" preguntó su voz dulce con aquel tono de solidaridad... Justo cuando pronunciaba esas palabras, mi mente viajó en el tiempo, trasladándose a aquel día nublado de abril. "Claro", le dije, "te puedes parquear de este lado".

El camino se hizo eterno, caminamos de la mano dentro del frío y tétrico lugar, suspiraba, recordaba, trataba de entender, me perdí por un instante. Tuve que parar y recordar aún con más lucidez... "Es enfrente", le dije... Recordé claramente, cómo estaba en construcción esa parte del lugar, cuando te fuimos a dejar ahí... Suave, inerte, fría, inmóvil...

Llegamos al lugar, estabas rodeada de flores. Un par de dibujos te expresaban su amor y cuánto eres extrañada, claro, deben haber algunos que te extrañen más que yo, en este mundo de gente mala y con corazones podridos, cómo no vamos a extrañar a los que nos aportaron lo mejor que pudieron.

No pude evitar ver que tus girasoles se estaban despegando, era de suponerse que el desorden obsesivo compulsivo y aquellos deseos que me dan de limpiar cuando estoy triste no me iban a dejar que eso quedara así. Fue entonces cuando me agaché a arreglar tu "habitación", si es que le podemos llamar así, debo confesarlo, no me atrevo a llamarle de otra manera.

Mientras pegaba tus girasoles, recordé los momentos que pasamos juntas. Recordé las risas, los regaños, las salidas, las travesuras, los amores perdidos... Fue ahí donde con los ojos llenos de lágrimas, me senté, tomé su mano muy fuerte, y lo vi con los ojos llenos de amor, nostalgia, ternura, tristeza...

"Me hubiera gustado que te conociera, ella estaría contenta de verme al fin bien"... Con la voz llena de paz y dulzura, con aquella sensación de comfort, él solamente dijo: "No te preocupes, ya me conoce, es sólo que tú no puedes verla". No... No puedo verla... Eso hace las cosas un poco más difíciles por acá.

Me quedé un rato sentada frente a tí, intentando creer que lo que veían mis ojos era realidad. No te había visitado desde el día que te dejamos ahí, un año y casi un par de meses atrás. Decidí ir a verte porque pensé que sólo así iba a asimilar la idea de haberte perdido, y no.. no fue así.. Al contrario, sólo pude agradecer su compañía en ese momento que fue igual de díficil que aquel día. "No te preocupes amor, las cosas que hemos pasado, que son tan parecidas, son las que nos unen más"...

Algún tiempo después, digo algún tiempo porque en realidad no sé cuantos segundos estuve ahí, o acaso minutos? Para mí fue una eternidad... Pero cuando esos minutos eternos pasaron, salimos del lugar, la lluvia, con ese toque dramático, anunciaba su llegada. Sin yo sentir se mezclaban mis lágrimas, con el llanto que del cielo brotaba...

Y debo admitir que visitarte no me hizo sentir ni un poquito mejor, debo admitir que aún espero a que salgas un día de tu fría morada, debo admitir que sigo esperando a que alguien me despierte y me diga que todo fue una terrible pesadilla... Debo admitir, que como el día que sucedió, espero aquella llamada que me diga: "Happy April´s fools day! Todo fue una broma".

4 comentarios:

Duffboy dijo...

A mí a veces me resulta más fácil pensar en que esos lugares son para quienes se quedaron en la tierra, un punto de referencia para conectarse físicamente con quien ya no está. A mi viejo le da por tocar los mausoleos, como diciendo: "ya vine". Gracias por permitirme estar a tu lado en ese momento. Te amo, y tu dolor es mi dolor.

Abner dijo...

debemos agradecer q esos seres tan queridos no estan viviendo ya en este mundo y estan en un lugar donde nada les atemoriza, ni les hace pensar en que seria mejor no estar aqui..

Aprovecha la vida!.. vivi lo que a ella le hizo falta (segun vos). Disfruta cada momento al lado de tu gente..

Andrea dijo...

Ay amiga, leer tu post me deja un nudo en la garganta, y no puedo más que mandarte muchos abrazos, y muchos "there, there".

Mishu dijo...

Amor: gracias por estar conmigo en ese momento... No me imagino yendo sola... Tenemos pendiente tu visita. Te amo! Gracias por ser mi apoyo.

Abner: Pues ya que otra me queda no? Claro, aprovecho la vida, vivo la mía y la disfruto... Pero sigo extrañándola... bah! Que con el tiempo pasará supongo. Abrazo.

Andreita: gracias nena. Tu comentario me sacó una sonrisa.. Digo por el "there, there"
Abrazos =)